Cada día, 842 millones de personas se acuestan con el pellizco del hambre agarrado a sus estómagos. El viernes, 7 de febrero, es el Día del Ayuno Voluntario, una jornada en la que, desde Manos Unidas, os pedimos un gesto de solidaridad con los 842 millones de personas que pasan hambre.
Hay muchos motivos para ayunar:
- Porque la indiferencia nos hace cómplices.
- Porque yo también tengo un papel en la obra de la creación de un mundo distinto.
- Porque creemos que solo con la unión de todos podremos crear ese mundo nuevo por el que Manos Unidas lleva trabajando 56 años.
Pero, además de estos, te ofrecemos otros muchos motivos para colaborar con nosotros. Porque estamos convencidos de que ese es el mejor porqué para convertir tu pequeña renuncia en algo grande.
Por todos: por sus derechos
"Los derechos humanos se violan (...) por condiciones de extrema pobreza y estructuras económicas injustas, que originan las grandes desigualdades". (Papa Francisco)
Manos Unidas lleva 54 años trabajando para ayudar a millones de personas, cuyos derechos se vulneran cada día, apoyando proyectos que les permitan vivir con dignidad en un mundo que les da la espalda.
Por ellos: por la paz
"La paz sólida y duradera entre naciones no consiste en la igualdad de armamento, sino en la confianza mutua". (Juan XXIII)
Con apoyo de Manos Unidas, el consorcio ZABIDA trabaja en Filipinas en un proyecto que se desarrolla en el entorno de la ciudad de Zamboanga y en la isla de Basilan, y que tiene como principal objetivo la educación para la paz y la prevención de conflictos, en una zona fuertemente castigada por la violencia".
Por ella: por la igualdad
"Hemos aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces; pero no hemos aprendido el sencillo arte de vivir juntos como hermanos". (Martin Luther King)
En los barrios marginales de los alredeores de la ciudad de Guatemala, Manos Unidas apoya proyectos escolares con el fin de garantizar la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres.
Por él: por la justicia
"Un hombre solo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo, cuando ha de ayudarle a levantarse". (Gabriel García Márquez)
Los pastores nómadas de la región de Afar, al norte de Etiopía, reciben apoyo de Manos Unidas para sedentarizarse y poder así integrarse en una sociedad que los discrimina.